Tras el 'enough is enough' que claman los manifestantes de la plaza Tahrir de El Cairo hay problemas reales que también encuentran eco en las protestas de estos días en Egipto. Cientos de egipcios que reclaman viviendas más baratas se han congregado hoy lunes delante de una oficina gubernamental, animados a defender su caso en medio de las masivas protestas que reclaman la dimisión del presidente del país, Hosni Mubarak.
Muchos de ellos han permanecido durante horas delante de las oficinas con su solicitud y algunos corearon que se unirán al campamento de protesta en la plaza Tahrir si las autoridades no dan curso a sus peticiones. "Si no nos decís que nos habéis aceptado, nos iremos a Tahrir", han asegurado.
Sohir y Amr, un matrimonio de casi 40 años que busca una vivienda que puedan permitirse, han asegurado que no abandonarán la oficina de la gobernación hasta que consigan lo que consideran su derecho.
"¿Cómo pueden decirnos que vengamos un determinado día y luego decirnos que nos marchemos, argumentando que no hay nada aquí para nosotros? ¿No están al tanto de lo que está pasando en la plaza Tahrir y de que la gente no se rendirá más y seguirá persiguiendo sus demandas?", afirma Amr.
La gobernación abrió sus puertas y permitió que algunos demandantes entraran, pero los responsables se negaron a responder a las preguntas de la prensa.
El Gobierno promete desde hace tiempo facilitar viviendas más económicas a los egipcios con bajos ingresos así como mejores de vida y más empleos. La población egipcia, de unos 79 millones, crece un 2% y el aumento de la vivienda no ha seguido el mismo ritmo.
Antes de las manifestaciones del 25 de enero, raramente se veían manifestaciones de más de unos cientos de personas y estaban vistas. "Desde entonces, las protestas en favor de los Derechos Humanos en el país para todos los egipcios han servido para restaurar su dignidad y poner fin a las humillaciones" afirmó el analista político Nabil Abdel Fattah, del centro Al-Ahram de Estudios y Política y Estrategia. "El mayor logro de esta protesta es el final de miedo de la ciudadanía", añade.
Dos tercios de la población es menor de 30 años y el grupo de edad supone el 90% de los parados. Alrededor del 40% vive con menos de dos dólares al día.
Fuente: http://www.reuters.com/
Muchos de ellos han permanecido durante horas delante de las oficinas con su solicitud y algunos corearon que se unirán al campamento de protesta en la plaza Tahrir si las autoridades no dan curso a sus peticiones. "Si no nos decís que nos habéis aceptado, nos iremos a Tahrir", han asegurado.
El Gobierno promete desde hace tiempo facilitar viviendas más económicas a los egipcios con bajos ingresos, pero no acaba de cumplir lo prometido
"¿Cómo pueden decirnos que vengamos un determinado día y luego decirnos que nos marchemos, argumentando que no hay nada aquí para nosotros? ¿No están al tanto de lo que está pasando en la plaza Tahrir y de que la gente no se rendirá más y seguirá persiguiendo sus demandas?", afirma Amr.
La gobernación abrió sus puertas y permitió que algunos demandantes entraran, pero los responsables se negaron a responder a las preguntas de la prensa.
Promesas desde el Gobierno
Antes de las manifestaciones del 25 de enero, raramente se veían protestas de más de unos cientos de personas
Antes de las manifestaciones del 25 de enero, raramente se veían manifestaciones de más de unos cientos de personas y estaban vistas. "Desde entonces, las protestas en favor de los Derechos Humanos en el país para todos los egipcios han servido para restaurar su dignidad y poner fin a las humillaciones" afirmó el analista político Nabil Abdel Fattah, del centro Al-Ahram de Estudios y Política y Estrategia. "El mayor logro de esta protesta es el final de miedo de la ciudadanía", añade.
Dos tercios de la población es menor de 30 años y el grupo de edad supone el 90% de los parados. Alrededor del 40% vive con menos de dos dólares al día.
Fuente: http://www.reuters.com/
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